Meta 2013 (anual): Fortalecer la cobertura y oportunidad del sistema de vigilancia
epidemiológica existente de las Leishmaniosis y garantizar el tratamiento
oportuno al 100% de los casos confirmados.
Objetivos:
Objetivos:
· Disminuir la
mortalidad y la morbilidad por Leishmaniosis
· Disminuir la
transmisión de la Leishmaniosis
Descripción Operativa del Programa:
El programa se encuentra dentro del Servicio Nacional de Erradicación
del Paludismo (SENEPA), el cual depende de la Dirección de Vigilancia de
Enfermedades Transmisibles del Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social.
Realiza la coordinación de las tareas con todas las instituciones
involucradas en las tareas de vigilancia y control de las Leishmaniosis y es la
entidad responsable de llevar adelante el conjunto de las acciones. Lleva el
registro de todos los casos de Leishmaniosis que se diagnostican en todas las
dependencias del Ministerio de Salud. Además lleva el control y distribución de
los insumos y la organización del sistema de diagnóstico y tratamiento de los
casos. Para hacer efectivos estos
últimos puntos, realiza actividades de capacitación de todo el personal de
salud de todo el país y elabora las normativas del Programa.
El estado paraguayo destina fondos para:
·
Diagnóstico
·
Tratamiento
·
Vigilancia
·
Control Vectorial – Químico
Patología de
denuncia obligatoria para el Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social
(MSP y BS).
¿Qué es la Leishmaniosis?
Las Leishmaniosis son un
conjunto de enfermedades infecciosas, parasitarias, con manifestaciones
patológicas que difieren mucho, tanto en su presentación clínica, como en su
pronóstico, causadas por protozoarios flagelados del género Leishmania.
Las Leishmaniosis son
enfermedades antropozoonóticas (del ser humano y los animales), endémicas y de
transmisión vectorial. Las Leishmaniosis están presentes en una gran variedad
de animales que actúan como reservorios, según la especie de Leishmania
involucrada, pudiendo ser: caninos, roedores, desdentados y marsupiales, entre
otros. En América las personas no actúan
como buenos reservorios y pueden ser contagiadas si entran en contacto con el
ciclo zoonótico de transmisión de las Leishmaniosis.
Las Leishmaniosis son enfermedades que se
encuentran presentes en 98 países. La Organización Mundial de la Salud (OMS)
estima que en todo el mundo hay más de 350 millones de personas que se
encuentran en riesgo de contraer leishmaniosis, con una incidencia aproximada
de 2 millones de casos nuevos por año (0,5 millones por leishmaniosis
visceral y 1,5 millones por leishmaniosis cutánea). La leishmaniosis visceral
causa alrededor de 50.000 muertes al año y es sobrepasada solamente por la
malaria dentro de las enfermedades parasitarias, causando 2.357.000 años de
vida ajustados por discapacidad, ubicándola en el noveno lugar dentro de las
enfermedades infecciosas.
Desde el punto de vista clínico, en América, podemos
hablar de dos tipos de Leishmaniosis,
causadas por distintas especies de Leishmania: Leishmaniosis Visceral Americana (LVA) o Kala-azar Neotropical (Fig. 1) y Leishmaniosis Tegumentaria Americana (LTA) que incluye la Leishmaniosis cutánea (LC)
(Fig. 2 y 3) y la
Leishmaniosis mucocutánea (LM) (Fig. 4)
LEISHMANIOSIS TEGUMENTARIA AMERICANA (LTA)
La LTA es una enfermedad
infecciosa, causada por protozoarios del género Leishmania, que afecta a piel y
mucosas, asociada con ciclos zoonóticos silvestres de transmisión. Las zonas de
mayor prevalencia de LTA en Paraguay, corresponden a los nuevos asentamientos poblacionales, especialmente de los
Departamentos de Canindeyú y San Pedro,
en áreas rurales boscosas de tierras poco explotadas, producto del avance de la
frontera agrícola (Fig. 7).
Considerando
la evolución clínica en humanos, la LTA posee dos fases: la Leishmaniosis
cutánea (LC) inicial (Figs. 2 y 3), que
son lesiones de piel que aparecen un tiempo después de la picada de los
flebótomos vectores, y la Leishmaniosis mucocutánea (LM) (Fig. 4) que
son lesiones que en la mayoría de los casos aparecen posteriormente en la
mucosa de la nariz, cuyo origen corresponde a una metástasis proveniente de la
úlcera primaria (diseminación por vía linfática o sanguínea).
LEISHMANIOSIS
VISCERAL AMERICANA (LVA)
La LVA
es una enfermedad, que en toda América, está causada por el agente Leishmania infantum y es una enfermedad relacionada
con zonas pobres. Históricamente el primer caso Americano fue descubierto por
Migone en 1911, en Paraguay y desde esa fecha hasta los últimos años del siglo
20 han sido encontrados unos pocos casos esporádicos. Entre los años 2000 y
2013 se ha incrementado notablemente el número de casos registrados de LVA.
LEISHMANIOSIS
VISCERAL AMERICANA (LVA)
La LVA
es una enfermedad, que en toda América, está causada por el agente Leishmania infantum y es una enfermedad relacionada
con zonas pobres. Históricamente el primer caso Americano fue descubierto por
Migone en 1911, en Paraguay y desde esa fecha hasta los últimos años del siglo
20 han sido encontrados unos pocos casos esporádicos. Entre los años 2000 y
2013 se ha incrementado notablemente el número de casos registrados de LVA.
¿Cómo se transmite?
El modo de transmisión es exclusivamente a través de la picadura de especies de insectos flebótomos (Karachâ, en idioma guaraní) de la subfamilia Phlebotominae. (Fig. 8).
¿Cuál es el vector?
Las especies incriminadas en la transmisión de
LTA en Paraguay son: Lutzomyia
neivai, Lutzomyia whitmani y Lutzomyia migonei (Young,
David & Arias, Jorge), que son especies de flebótomos presentes en toda la
Región Oriental del país y asociadas a la transmisión de Leishmania braziliensis. Estas especies se encuentran ampliamente
distribuidas en el territorio nacional. Además de éstas especies mencionadas,
existen otras que pueden estar actuando en el mantenimiento de la transmisión
silvestre de LTA, y que merecen un mayor estudio.
El agente transmisor de LVA
en América es otro flebótomo de la especie Lutzomyia
longipalpis (Fig. 8).
Solo las hembras son transmisoras, pues ellas
necesitan alimentarse de sangre para deponer los huevos. El macho, en cambio,
se alimenta de jugos de las plantas.
Los flebótomos ponen sus huevos y desarrollan
sus larvas sobre suelos húmedos donde predomina materia orgánica en
descomposición, como por ej. debajo de la hojarasca de los bosques naturales,
en la parte inferior del tronco de los árboles, en los patios de las viviendas,
en los troncos de árboles caídos en descomposición, en basurales húmedos
provocados por el hombre. Además, son sitios privilegiados para la cría de
larvas el suelo de gallineros y chiqueros, pues los insectos tienen allí, a su disposición,
animales de cuya sangre alimentarse.
¿Cuál es el agente etiológico?
El agente etiológico (parásitos del género Leishmania) pertenecen a la familia Trypanosomatidae (que abarca también al
género Trypanosoma), dentro del reino
Protozoa.
Leishmania
se
presenta en dos formas: amastigotes
redondeadas pequeñas, sin flagelo externo, dentro de los macrófagos en donde se
multiplican por división binaria (Fig. 9), y promastigotes,
en el tubo digestivo del insecto vector (Fig. 10). Los promastigotes son infectivos para
los vertebrados, penetran en la piel de un nuevo hospedador vertebrado no
infectado (el hombre u otro animal susceptible) mediante la picadura del
vector.
El
agente etiológico de LTA, aislado a partir de lesiones cutáneas y mucosas, en
los últimos 10 años, procedentes de varios departamentos de Paraguay,
ha sido tipificado como Leishmania (subgénero
Viannia) braziliensis.
El agente etiológico de LVA, aislado a partir de
vísceras de perros y de médula ósea de personas, procedentes de distritos del
departamento de Central y Asunción, ha sido tipificado como Leishmania (subgénero Leishmania) infantum (chagasi).
¿Cuáles son los síntomas de la enfermedad?
LEISHMANIOSIS CUTANEA (LC): la presencia de ulceraciones características en el
sitio de la picadura del insecto vector. Las lesiones pueden ser únicas o
múltiples, siendo la forma ulcerada (Fig. 2) la más común y se caracteriza por ser
una llaga con bordes sobre elevados, de contorno regular circular u
ovoide. El fondo de la misma es
granuloso, con o sin exudación. En
general las úlceras son indoloras. Pueden observarse también, en menor
proporción, úlceras costrosas (Fig. 3), impetigoides, ectimoides,
ulcero-vegetantes, verrugosas, entre otras. Con el tiempo, las lesiones pueden
cicatrizar por sí solas, siendo este fenómeno considerado una cura aparente.
Dejan una cicatriz típica reconocible a simple vista (Fig. 5).
LEISHMANIOSIS MUCOCUTÁNEA: se presenta en la mayoría de las veces en forma
secundaria a las lesiones cutáneas primarias, apareciendo generalmente años
después de la resolución aparente de las lesiones por LC. La mucosa nasal es
generalmente la más afectada, seguida de los
labios, paladar, faringe y laringe.
Las principales quejas de los pacientes son: obstrucción nasal,
sensación de mordedura (osu’u en
idioma guaraní), epistaxis (sangrado nasal), rinorrea crónica, costras,
ronquera y disfonía. Las lesiones pueden
ser pequeñas y ocasionar pocos síntomas por lo que es muy importante realizar
una buena inspección clínica del caso sospechoso. En el examen clínico pueden observarse,
infiltración, ulceración, perforación del tabique nasal, lesiones
granulomatosas, ulcero-vegetantes, ulcero-costrosas o destructivas. Puede haber
destrucción parcial o total de la pirámide nasal y otras estructuras afectadas
en la boca y labios (Fig. 4). La presencia de una o varias cicatrices
(Fig. 5) en la piel o una historia de úlcera cutánea con una
evolución prolongada además de los síntomas referidos por el paciente, refuerzan
el diagnóstico clínico de la LM.
LEISHMANIOSIS
VISCERAL:
·
Fiebre prolongada, que dura semanas a meses.
·
Abdomen abultado, debido al agrandamiento de bazo
(esplenomegalia) (Fig. 1)
·
Decaimiento, enflaquecimiento, a veces tos seca.
·
Anemia, glóbulos blancos bajos y plaquetas bajas.
·
Sangrados y moretones.
·
Enfermedades oportunistas como neumonías y
diarreas.
·
Las personas que no son tratadas a tiempo mueren
por las complicaciones.
¿Qué hacer en caso de
presentar los síntomas?
En áreas rurales de contagio: Concurrir al puesto de salud o centro de
salud más cercano.
Por sospecha de LTA, en las grandes ciudades: Consultar con
dermatólogo/a (LC), con un otorrinolaringólogo (LM), o bien con médico clínico.
Por sospecha de LVA, en las grandes ciudades (Fig. 6 B):
Consultar en el Hospital Regional correspondiente, o bien, en Asunción y
Departamento Central, con los hospitales de referencia: Instituto de Medicina
Tropical (Asunción), Hospital General Pediátrico “Acosta Ñu” de Reducto (San Lorenzo), Centro
Materno-Infantil del Hospital de Clínicas (San Lorenzo), Hospital Nacional (Itauguá),
Hospital Central de IPS (Asunción).
¿Cómo se realiza el
diagnóstico y dónde?
1.
LEISHMANIOSIS TEGUMENTARIA
AMERICANA (LTA)
El diagnóstico por
probabilidad de la LTA se basa en tres criterios:
· Diagnóstico clínico, es decir, presencia de ulceraciones características (Fig. 2 y 3)
· Diagnóstico epidemiológico del caso, es decir procedencia de zonas endémicas (Fig. 6 A)
· Resultado de las pruebas diagnósticas: la principal prueba
es la Intradermorreacción
de Montenegro (Fig.
11 y 12). También son utilizadas la INMUNOFLUORESCENCIA
indirecta (IFI), frotis y coloración de Giemsa,
cultivo de biopsia de la lesión (Fig. 13 y 14) y reacción
de polimerasa en cadena (PCR, por sus siglas en inglés).
2.
LEISHMANIOSIS VISCERAL
AMERICANA (LVA)
DIAGNÓSTICO CLÍNICO DE LA
LVA
INFECCIONES INAPARENTES: En las infecciones inaparentes o asintomáticas
no hay evidencia de manifestaciones clínicas. Los títulos de anticuerpos en
general son bajos y pueden permanecer positivos por un periodo prolongado. Las
formas asintomáticas son aquellas observadas en pacientes provenientes de áreas
endémicas en donde hay evidencia epidemiológica e inmunológica de infección.
Los pacientes con infección inaparente o asintomáticos,
NO serán notificados NI deberán
ser tratados.
PERIODO INICIAL: Se caracteriza por el inicio de la sintomatología que puede variar entre
pacientes, sin embargo en la mayoría de los casos presentan fiebre con una
duración inferior a cuatro semanas, palidez cutáneo-mucosa y
hepatoesplenomegalia. El estado general del paciente es bueno; el bazo
generalmente no sobrepasa los 5 cm. del reborde costal izquierdo. El hemograma revela generalmente anemia
(Hemoglobina < 9g/dl), linfocitosis, Velocidad de eritrosedimentación elevada
(>50mm) y las proteínas totales y
fracciones pueden estar discretamente alteradas.
PERIODO DE ESTADO: Se caracteriza por fiebre
irregular, generalmente asociada a pérdida de peso progresivo, palidez
cutáneo-mucosa y aumento de la hepatoesplenomegalia (Fig.
1). Por lo general presenta un cuadro clínico arrastrado con más de
2 meses de evolución asociado a compromiso del estado general. Los exámenes
complementarios evidencian anemia, leucopenia, linfocitosis, trombocitopenia e
inversión de la relación albúmina/globulina. Puede presentarse elevación de los
niveles de aminotransferasas (2 a 3 veces del valor normal),
hiperbilirrubinemia y aumento discreto de los niveles de urea y creatinina.
PERIODO FINAL: Sin tratamiento, la
enfermedad evoluciona progresivamente al periodo final con fiebre continua,
compromiso del estado general más intenso, desnutrición, hemorragias, ictericia
y ascitis. Estos pacientes fallecen generalmente debido a sobreinfección
bacteriana y hemorragias.
COMPLICACIONES: Las complicaciones más
frecuentes de la LVA son infecciosas sobreagregadas. Dentro de ellas se
destacan la otitis media aguda, piodermitis, infecciones del tracto urinario y
respiratorio.
DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL: Debe hacerse diagnóstico diferencial con Paludismo, Tuberculosis
miliar, Enfermedad de Chagas aguda, Mononucleosis infecciosa, Enfermedad
mieloproliferativa, Fiebre tifoidea.
DIAGNÓSTICO LABORATORIAL DE LVA
Las pruebas laboratoriales indirectas principales son las que miden
anticuerpos, por los métodos de Inmunofluorescencia indirecta e
inmunocromatografía con antígeno RK39 (Fig. 15). Los métodos directos recomendados utilizan material procedentes de
médula ósea, siendo las pruebas utilizadas el frotis (o impronta) coloreado con
tinción de Giemsa, anatomía patológica, cultivo y PCR. (Fig. 13 y 14)
¿En qué consiste el
tratamiento?
DROGAS DE PRIMERA ELECCIÓN: ANTIMONIALES PENTAVALENTES.
TABLA: Dosis, días y vía de
administración de Antimoniales pentavalentes para las distintas Leishmaniosis,
según el peso del paciente.
1 La aplicación
intramuscular, especialmente en niños, será considerada a criterio del personal
de salud.
2 Si el paciente presenta una
mejoría clínica evidente, el tratamiento puede suspenderse a los 20 días.
3 En pacientes de más de 65
Kg., la dosis de un tratamiento regular se ubica entre 15 y 20 mg/Kg/día.
Presentaciones comerciales:
Estibogluconato de sodio: Presentación en frascos de 100 ó 30 ml, con una
concentración de 100 mg de Sb+5/ml. Nombres comerciales: PentostamÒ, Estiboglugonato de sodio
(genérico, de procedencia hindú). Fig. 8
Antimoniato de meglumina: Presentación en caja de 25 ampollas de 5 ml, a
una concentración de 81 mg de Sb+5 /ml. Nombre comercial: GlucantimeÒ. Fig. 9
Se considera que ambas
presentaciones comerciales de antimoniales pentavalentes son igualmente
efectivas para el tratamiento de la Leishmaniosis, aunque se presenten con
distintas concentraciones.
DROGAS DE SEGUNDA ELECCIÓN:
-
ANFOTERICINA B DESOXICOLATO
Fig. 17
-
ANFOTERICINA B LIPOSOMAL Fig. 18
¿Cuáles son las medidas preventivas?
· Utilizar camisas con mangas largas, pantalones largos y repelentes
cuando se ingresa al monte.
· Dormir protegido por
mosquiteros, en zonas rurales de contagio.
· Limpiar de malezas y
matorrales los patios cercanos a la casa. No acumular basura (Fig. 16).
· Comunicar a la
municipalidad sobre la existencia de perros vagabundos y con síntomas de
Leishmaniosis. Los perros enfermos deben ser sacrificados.
· Comunicar a la comunidad
sobre el riesgo y la forma de contagio de las Leishmaniosis.
· En caso de personas con
síntomas, acompañarles al Puesto de salud o Centro de Salud correspondiente.
Donde puedo reportar cantidad de perros enfermos probablemente con leymaniasis....El lugar es colinas de Thomson barrio kenedy
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